La mayoría de las arañas son beneficiosas manteniendo varias plagas de insectos bajo control. En lugar de matar a las arañas, llévelas fuera y liberaras en el jardín. Sacando a las arañas de tu hogar y cuidando el ecosistema al mismo tiempo.
Mantenga la higiene del hogar. Despeje todas las telas de araña, asegurándose de eliminar los huevos. Mueva y quite el polvo con frecuencia detrás de muebles, cuadros y electrodomésticos.
Elimine las fuentes de alimentos de las arañas en el hogar (incluyendo moscas, cucarachas y polillas) y será menos probable que vuelvan. Revise y repare todas las ventanas, y selle las grietas.
Retire las pilas de madera, basura y escombros de alrededor de los cimientos de su hogar. Asegúrese de usar ropa que lo proteja: camisas de manga larga, pantalones largos, guantes y botas.
Limpie la parte exterior de su hogar para destruir las telas y los huevos de arañas.
Reemplace las luces al aire libre con bombillas amarillas o de vapor de sodio, que son menos propensas a atraer a los insectos, y luego a las arañas en tu hogar.
Sacuda la ropa guardada antes de ponérsela.
Consejos y advertencias
Si estás decidido a usar químicos contra las arañas, tenga en cuenta que estos sólo son eficaces si son echados directamente sobre la araña. Un matamoscas funciona rápido.
Solo dos tipos de arañas venenosas habitan en América del Norte: la viuda negra y la reclusa parda. Esté atento a las viudas negras en las pilas de madera, basura o piedras, cobertizos, garajes y graneros. Tenga cuidado con las arañas reclusas pardas en la ropa vieja, detrás de los cuadros o en los rincones oscuros.